A menudo me preguntan la raza de mi perra y al responder me miran con cara extraña. El nombre completo es West Higland White Terrier pero por supuesto el abreviado es el que todos conocemos el Westy, los perritos con zanahoria por rabo, llamados así por su característico rabito tieso.
Estos perros son de la familia de los Scottish y su origen está en Escocia.
Este westy está pelado para una exposición y quizás os parezca algo exagerado pero realmente tienen un encanto especial, por ello su silueta es la misma que representa la marca de Agatha Ruiz de la Prada.
A pesar de ser pequeños (un macho adulto puede llegar a pesar 8’5kg) son muy fuertes y, todo hay que decirlo, algo cabezones. Son testarudos, si se empeñan en algo no pararán hasta conseguirlo, pero son excelentes compañeros de juego y podéis conseguir jugar al escondite con ellos.
A parte de testarudos y juguetones suelen ser muy vivaces y atentos siempre con esas orejitas triangulares a todo lo que oyen.
La parte mala de esta raza es su tendencia a tener alergias en la piel, las cuales pueden conseguir aminorarse con cuidados especiales hasta casi desaparecer.
Si quereis que el pelo de vuestro pequeño westy sea duro y vaporoso os desaconsejo totalmente el pelado a máquina, el pelado especial de estos perros se llama trimming, que consiste en arrancar el pelo y utilizar tijeras para recortar(no os preocupéis por la palabras arrancar, no es tan grave como suena).
De cachoros estos perros, aparte de ser verdaderos peluches de cuerda, tienen las orejas gachas y conforme van creciendo las podrán levantar.
Así, para hacer honor a mi Panky os dejo dos fotografías suyas:
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